Fácil y rápida de implementar y con el potencial para minimizar la participación humana en las ubicaciones físicas de las empresas. Éstas son algunas de las principales razones por las cuales la automatización robótica de procesos (RPA) fue una de las tecnologías más favorecidas por el contexto de la pandemia, en Latinoamérica y el mundo.
También se trata de una innovación no invasiva: se puede implementar sin alterar las aplicaciones con las que interactúan. E incluso otorga a los usuarios la posibilidad de avanzar en la automatización aunque tengan bajo o nulos conocimientos de lenguajes de programación, gracias a su propuesta low code.
En un mundo incierto, RPA ofrece a las organizaciones la posibilidad de ser más ágiles y flexibles. Al mismo tiempo, les permite preservar al máximo sus recursos y de liberar talento para que se concentre en tareas estratégicas.
Con las barreras de entrada cada vez menores, una excelente relación costo-benefici y un mercado que cambia de manera inesperada , no sorprenden las estimaciones de Bain & Company: en los próximos dos años la adopción de RPA podría duplicarse. Al mismo tiempo, Gartner sostiene que el 30% de los directorios la tienen entre sus prioridades estratégicas.
Avance regional de RPA
En Latinoamérica el COVID-19 marca un antes y un después en las motivaciones que tienen las empresas para invertir de automatización. Anteriormente, los impulsores eran liderados por la disminución de costos y la mejora en el rendimiento y la calidad. Hoy al tope del ranking se encuentran la resiliencia y la continuidad del negocio, la generación de insights y la disminución de los riesgos.
En efecto, el estudio RPA Latam 2021 realizado por Practia detectó que la amenaza de desaparición fue el principal driver en nuestros países para avanzar con esta tecnología. En 2020 el número de empresas de Latinoamérica que inició proyectos creció un 8% hasta llegar al 44% (a esto hay que sumar un 21% que tiene el proyecto escalado). Apenas un 11% no planifica hacerlo.
En una mirada por industrias, se notaron fuertes movimientos en Servicios Financieros (48% inició, 25% lo tiene escalado), Retail (34% y 21%), Energía (37% y 34%), Alimentos (43% y 21%) y Construcción (50% y 10%). Destacan Telecomunicaciones, con un 47% de empresas con proyectos escalados, y Salud, con un 58% de organizaciones iniciando proyectos
La mirada estatégica
Esta urgencia puede conducir a algunos errores. La implementación debe generarse de manera adecuada para evitar problemas de mantenimiento, desborde de costos de infraestructura y pérdida de control de algunos procesos. En muchos casos el entusiasmo original se convierte en decepción. Esto puede darse porque no se logra escalar las soluciones más allá del proyecto inicial y porque la inversión no termina de justificarse del todo.
Siempre es recomendable, en ese sentido, definir los beneficios esperados antes de establecer el conjunto de procesos a automatizar, una actividad que puede realizarse de forma rápida y efectiva siguiendo diversas metodologías muy reconocidas en el mercado. Del mismo modo, es esencial aplicar gestión del cambio para minimizar la resistencia y favorecer el éxito del proyecto.
La aceleración de la transformación digital abarcó también al mundo de la RPA en Latinoamérica. Los analistas estiman que en los últimos doce meses se avanzó lo que se esperaba que ocurriera en tres a cinco años. Por eso, paradójicamente, lo mejor es no adoptar la tecnología automáticamente, sino tomarse el tiempo para hacerlo bien y de manera alineada con los objetivos estratégicos de la organización. Las soluciones y proveedores que mejor se adapten a las necesidades particulares también hacen la diferencia.
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